Aguantando mecha

Permítanme un artículo que no regalará ninguna oreja. Estoy preocupado. Incluso diría que estoy enojado. Está claro que estos sentimientos no me afloran ni todos los días ni de forma permanente. Son un poso, una gota –malaya– que va haciendo agujero y que, pese a que no ha conseguido que vote un extremo, que deje

No!

En El hombre sublevado, Albert Camus nos explica que la auténtica revuelta consiste en decir no. Uno no que niega, pero que no renuncia. Uno no que pone límites y dice “hasta aquí sí, pero más allá no”. Callar es dejar creer que no se juzga ni se desea nada, que nos da igual. El